EL BRITANO CAPITULOS 35 Y 36

Me habia quedado dormida junto a Bruno  cuando de repente una dulce voz me despertó. No era una voz conocida pero era una hermosa voz. Miré a Bruno y noté que no respiraba. Me levanté y llamé  a Edward. Habia salido afuera  a ayudar a Marcelo  en unas cosas de la granja.  En cuanto me oyó  vino  presuroso.  Llegó  y  se acercó  a la cama , lo examinó... Después se  giró  y me estrechó entre sus  brazos.
" Bella.... creo, creo  que está  muerto."
" Llama a  Marcelo ", le dije  medio llorosa.
Enseguida vino. Él  habia sido militar, habia visto a muchos soldados muertos. Entró y nos miró. Se imaginó lo que pasaba. Examinó  a  Bruno.
" Bella , está muerto, pero no estés triste.  Jesus  está con él.  Recemos una oración  por él.
Los  tres  nos arrodillamos  y Marcelo  habló :  " Señor,  estamos  aqui para pedirte por Bruno, el amigo de Bella. Él  siempre fue  bueno y crió  a Bella  con  amor  y dulzura . Yo sé  que él  está contigo  ahora  y  no  debemos estar tristes. Amen."
Me  apoyé  en el pecho de Edward  y  comencé a  llorar  copiosamente . Edward  me abrazó con fuerza  y me llevó  fuera  de la casa. Nos  sentamos  en un banco , en la porchada  de la casa. Yo no podía dejar de llorar.
" Bella, mi amor, ... no llores ", me dijo Edward  consolandome. " Él  ahora está  feliz  y tranquilo con  Jesus. Esto  debe ser  una señal  de algo , pero  a veces las señales de Cristo  son dificiles  de entender ", me dijo besando mis labios húmedos por las lágrimas.  " Lo enterraremos aqui en nuestra parcela, así siempre estará con nosotros ".
En ese momento llegó Tomas, el pequeñin de 5 años  y me vio llorosa.
" ¿Tú  estás  triste, Bella ?  ", me preguntó  mirándome  con unos ojos  grandes  y  marrones.
" Un  poco ", respondí.
" Yo  sé  una cosa  para  no estar  triste...  Un  perrito  de  Lala ! "
" ¿ Quien  es  Lala ? " , pregunté.
" Es  la perra  de Marcelo  y tiene perritos ¿quieres  verlos ? "
Fuimos al granero que estaba muy cerca de allí  y enseguida vimos en un rincón , una  enorme  perra pastor  que tenia varios cachorros  a  su alrededor . Por un momento  olvidé que Bruno acababa de morir  y me lancé como una niña  a ver  a los  cachorritos.  Eran  cinco  y estaban  jugueteando entre ellos  y  otros  mamaban  de su  madre. 
" Ay, qué  hermosos son ! ", exclamé  sin poder contenerme. " ¿Puedo  coger  uno ? "
Edward cogió uno de los cachorritos, el mas espabilado  y lo  puso en mi regazo. Lo  acerqué  a  mi cara  y lo besé. Era un encanto .
" ¿A que ya no estás triste? ", me preguntó  Tomas.
" No, ya no. "
" Míralos, son muy  dulces ", dijo Edward  y con  su mano acarició  a la perra y a los cachorros. " Lala  debe estar  muy contenta  con sus hijos , pero aún son muy pequeños y deben estar con su madre. ", cogió al cachorrito  y lo depositó  con su madre.
Regresamos a casa y nos lavamos  para  la cena . La vida debía continuar.
No tenia que sentirme triste aunque Bruno hubiera muerto . Su espiritu estaba con Cristo.
La mesa ya estaba  preparada y los niños sentados y muy formalitos . No alborotaban . Evidentemente  sabian  que  habia pasado algo grave. Cenamos sopa caliente, que me reconfortó el estomago, y después jamón  y tortas dulces, manzanas y ciruelas. Pero después de la sopa yo no comí a paenas nada mas . Luego Marcelo contó el habitual cuento a los niños  , pero  esta vez no trató de  Jesus  , sino de un burrito y una vaca y un establo con un niño. Qué gran padrazo Marcelo !  Me  preguntaba si algun día me contaría su historia. Deseaba conocerla.
Me sentía cansada y despues de un rato de observar a los niños, Edward y yo  nos fuimos  a dormir .
Mientras nos desnudabamos  para meternos en la cama, le pregunté compungida :
" Edward... ¿quién va a velar  a Bruno  toda la noche ? "
Se  acercó  a mi y  me besó  en los  labios  diciendome :
" Tranquila, mi amor. Bruno está con Cristo  y  en esa habitación  solo está su cuerpo. No es necesario estar allí.  Mañana temprano  Marcelo y yo  lo prepararemos  y haremos  el entierro.  Y  ahora  vamos  a dormir. Estás  muy cansada."
Terminé de desnudarme  y nos acostamos . Aunque era verano, estaba temblando  de frío y me  abracé a Edward para que me diera calor con su cuerpo. Alguien me habia dicho que cuando una persona  moría , otra vida se estaba formando... Pensé en la posibilidad  de llevar dentro de mi un hijo de Edward.
" Edward... estoy feliz de que Bruno haya sabido que estoy aquí segura contigo".
" Yo también estoy feliz. Mañana no quiero que te levantes temprano.  Marcelo  y yo  estaremos  cavando la... la....fosa  y  no  quiero que  lo veas, Bella. "
" Pero  Edward, yo ya he asistido  a  entierros  antes ", le dije.

" No es lo mismo... Esto es un enterramiento  y  no  quiero  que lo veas ",  me dijo  tapando mis labios  con los suyos... Hacía  tantos días  que no haciamos  el amor , pero  esa noche estaba muy cansada...