miércoles, 30 de enero de 2013

EL BRITANO CAPITULO 61

Los  demás niños no se habían enterado de nada  pues también se habían ido a la siega.  Querían  subirse en el carro lleno de heno recién cortado . Por eso no había nadie en la casa. Sólo nosotras y  Edward.

Edward y yo fuimos hasta el carromato , subimos y nos dirigimos camino de la ciudad. El soldado nos vigilaba. Yo debía ser fuerte pero estaba temblando de  miedo.

"No tengas miedo " , me dijo Edward. " Hay que confiar en Jesus. Ya verás cómo se arregla todo. "
" Les diré que soy una patricia romana y nos soltarán".

Busqué los labios de Edward y nos besamos . Me  tranquilicé con el olor de su cuerpo  y con su calor.  Llegamos por la noche a la ciudad y nos condujeron al calabozo.

" Me niego a pasar la noche en un calabozo ! ", dije al oficial. "Soy patricia de Roma, mi nombre es Publia Cornelia Bella ". No podía creer mi determinación y valentía, pero tenía que salvar a Edward , y añadí :
"Aquí está el sello y el anillo de mi padre ".

El joven  prefecto, que evidentemente era un sustituto del anterior, más viejo y veterano, miró detenidamente los anillos. Vio que eran auténticos.
"¿Y qué hace una patricia de Roma aquí? " , me preguntó traspasándome con la mirada.
"Me marché de Roma y eso no te importa. Mi esposo y yo no vamos a pasar la noche en un calabozo. Exijo que nos liberes".
"Eso no resolvería el asunto del niño", me respondió. "Podéis comer algo en el cuarto del vigilante y quedaros allí. Mañana se  solucionará todo. "

Entramos y nos sentamos a la mesa. Habían restos de la cena: pan, carne y una jarra de cerveza.
"Comamos  algo y descansemos aquí" , me dijo Edward.  "Mañana aparecerá  Marcelo . Supongo que a estas alturas ya se habrá enterado  de todo  y habrá ensillado su caballo  para venir aquí.  Esto no habría pasado si yo no me hubiera ido a segar." , me dijo acariciando mi pelo. "Yo he tenido la culpa de todo".
"No digas eso, tú no podías saberlo" , dije. "La culpa la tiene ese nuevo y joven magistrado. Parece que se toma muy en serio todo lo que le enseñaron en la escuela."

Estábamos sedientos  y bebimos cerveza . Comimos pan y un poco de carne, pero estaba seca y dura.  Edward llevaba en el bolsillo  queso y una manzana  y me los dio.
"Come, tienes que comer ",  me dijo.
"¿Y tú ?" , le pregunté.
"Me comeré esta carne seca. Tengo buenos dientes.  No te preocupes , todo se arreglará mañana. Comamos  deprisa y luego rezaremos ".

Terminamos y me acomodé con Edward en el banco de madera que había en la habitación.  Nos sentamos lo mejor que pudimos y nos abrazamos.
"Dentro de unas horas amanecerá...  Vamos a rezar,  Bella.  Estamos juntos y eso es lo que importa ." , apoyé  mi cabeza en el pecho de Edward.  "Señor Jesus, te damos las gracias por tenernos el uno al  otro  y por  ese  niño que está  dentro de Bella.  Confiamos en  ti  y sabemos que tú  nos vas a ayudar.  Te  queremos mucho. Amen. "
Me miró  y me  preguntó : " ¿Quieres añadir  algo tú ? "
" Sí... te pido que perdones a Isra.  Estaba muy asustada cuando dijo  eso.  Pude verlo  en su cara.... tenía  mucho miedo."
"No te preocupes, Bella.  Él  sabe que somos humanos  y que tenemos miedo. "


3 comentarios:

  1. por qué vas tan lenta con los capitulos ??????
    cuenta lo que pasa, please!
    los rescata el Marcelo?????

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    Respuestas
    1. ja ja ja ja ja
      qué mala soy !!!!

      así hay más emoción, no?

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    2. ah qué mala Mariiiiiii !
      por favor continua pronto con el siguiente.
      Perdon por no entrar mas al blog, no pude
      besos!

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